Los beneficios que proporciona en arbolado en las ciudades, también llamados servicios ecosistémicos del arbolado son abundantes pero, en algunos aspectos, desconocidos por la población en general.
SDL realiza inventarios de servicios ecosistémicos, talleres y jornadas de valoración del arbolado que ayudan a una mayor sensibilización y a una mejor gestión de las ciudades desde el punto de vista de la salud y de la resiliencia frente al cambio climático. Aquí os presentamos algunos casos de estudio.
CASO 1.- ¿QUÉ ES MEJOR PARA LAS CIUDADES ÁRBOLES GRANDES O PEQUEÑOS?
Se realizó un inventario de arbolado urbano en una urbanización del Ayuntamiento de Villalbilla (Madrid) contabilizando un total de 2.500 árboles. En el inventario, además de los parámetros recogidos de ubicación, especie, tamaño, estado estructural y sanitario y del entorno, se tomaron datos específicos para medir los beneficios ambientales: eliminación de contaminantes, almacenamiento y secuestro de carbono, producción de oxígeno según metodología del software i-tree Eco (para más información consultar en: Estudio y valoración de los servicios ecosistémicos del arbolado urbano de la urbanización Zulema-Villalbilla (Comunidad de Madrid) Susana Domínguez-Lerena, Alejandro Manzano Rodríguez y Vanessa Aguilar Parra. Actas del 48 Congreso de Parques y Jardines Públicos PARJAP Zaragoza 2022)
Influencia de la especie en la generación de beneficios ambientales.
Con el objetivo de evaluar la influencia del tamaño de la copa (área foliar) en la producción de servicios ambientales, teniendo en cuenta para ello las especies más representativas del territorio estudiado, se realiza la siguiente tabla (tabla1)
Tabla1. Análisis de las especies más representativas en base a sus valores medios. En color verde se encuentran marcados aquellos valores más altos para cada parámetro considerado y en naranja los valores mínimos
Se observa, de manera evidente, que las especies que cuentan con un área foliar superior generan los valores más elevados para cada uno de los parámetros. Mientras que las especies con menor área foliar generalmente obtienen unos resultados inferiores.
Ligustrm sp y Robinia pseudoacacia son las especies que cuentan con menor área foliar de media, siendo a su vez los que peores resultados muestran para practicamente el total de los servicios analizados. Por otra parte, especies como los pinos, olmos o arizónicas son los que presentan mayor área foliar obteniendo datos muy superiores para cada uno de los servicios propuestos.
Destacar también especies como el platano o el cedro que para valores de área foliar intermedios (amarillo) muestran buenos resultados principalmente en la fijación de contaminantes. Este hecho puede poner de manifiesto la importancia de emplear ejemplares adaptados a la contaminación, como el plátano, que favorece la presencia de pies sanos y mejoran los servicios ofrecidos. Además, es interesante la presencia equilibrada de árboles siempre verdes (cedros, cipreses, pinos) y otros caducifolios (olmos, melias), pues aseguran una producción más estable durante todo el año.
Comparativa de dimensiones y servicios ecosistémicos.
Para poder valorar la influencia del tamaño del árbol en relación a los beneficios ambientales que producen, se seleccionaron 4 árboles del inventario, 2 olmos y 2 cipreses, con tamaños diferentes para realizar una comparativa entre los servicios proporcionados por un ejemplar de dimensiones reducidas con otro de mayor tamaño.
Se escogieron ejemplares con condiciones altas de salud y sin estar terciados, para conseguir una comparación lo más real y precisa posible.
Tabla 2.- Comparativa de beneficios ambientales de dos especies diferentes en relación al tamaño de los árboles
Como se puede observar en la tabla, los ejemplares con el triple de tamaño consiguen multiplicar considerablemente los servicios ecosistémicos, multiplicando por 12 la eliminación de contaminantes, en el caso del olmo y por 31 en el caso del ciprés. El valor del almacenamiento de carbono llega a ser 11 veces más en las dos especies, mientras que la producción de O2 y secuestro de carbono se multiplica por 4, en el caso del olmo y por 2, en el caso del ciprés. A través de esta comparativa entre ejemplares de distinto tamaño, queda de manifiesto el incremento producido en los beneficios proporcionados por los árboles a medida que aumentan sus dimensiones. Destacando especialmente la influencia de la copa, representada por el área foliar:
- Un aumento en el área foliar del ejemplar genera un incremento de similares proporciones en la fijación de partículas contaminantes, existiendo una relación directa entre este (las partículas contaminantes se eliminan a través de las hojas) Resultado obtenido para ambas especies seleccionadas, tratándose de especies de características muy diferentes como son los olmos y los cipreses.
- De manera similar ocurre con la cantidad de carbono almacenado, el aumento del tamaño tanto de la copa como del tronco de los árboles, permite una mayor capacidad para retener y almacenar carbono en sus tejidos.
- Respecto al resto de parámetros (producción de oxígeno y secuestro de carbono) se produce un incremento más reducido con el tamaño de los ejemplares. Sin embargo, como mínimo se duplican los beneficios proporcionados con el crecimiento de los individuos.
Una vez comprobada la relación existente entre el área foliar y los servicios ecosistémicos proporcionados, es importante mencionar la necesidad de llevar a cabo buenas prácticas de mantenimiento del arbolado. Así la poda de terciado es una práctica ampliamente extendida en muchos Ayuntamientos españoles. Con esta poda se reduce la longitud de las ramas y, por tanto, una reducción en la copa lo que supone una disminución similar en los servicios proporcionados por el árbol.
Así, el olmo analizado anteriormente no se encuentra terciado y proporciona una gran cantidad de servicios ecosistémicos. Dicho árbol en caso de ser terciado tendría una considerable reducción en los servicios ambientales generados.
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